En principio la actuación era para adultos ya que la hora de comienzo era a las 22 h. del viernes pasado.Al ir a montar el espectáculo en la Sala Gromeló del Bar La Caja Tonta, vi que estaban celebrando un cumpleaños infantil.
¿Y qué pasó?
Pues nada más y nada menos que, llegada la hora de comienzo, una parte de mi público eran niños tal y como podéis apreciar en las fotos.Unos niños súper salados.
Menos mal que, como mago todo terreno que soy, procuro siempre llevar magia de todo tipo y así, de este modo, logramos pasar un rato muy agradable y entretenido tanto los adultos como los niños..
Tengo que dar las gracias a Javier y a Bea encargados y responsables de la Sala Gromeló, porque me facilitaron todos los medios necesarios de luces y sonido y me sentí súper cómodo.También, como no, agradecer a Marta Marco este reportaje fotográfico que refleja su profesionalidad y buen hacer.
Y por supuesto gracias a todos y todas por vuestra asistencia.